EL EMBARAZO: CAPITULO I

Cuando despues de plantearte la maternidad, un dia por fin descubres que estas embarazada, te entra una mezcla de inmensa alegria y al mismo tiempo cierto pánico.

Lo primero que una embarazada debe decidir, es la forma en la que va a llevar su embarazo, sanidad pública, privada o mixto.

Yo decidí hacerlo por la sanidad pública consciente de las diferencias con la privada y segura de no cometer la locura de pasarme todo el embarazo en el ginecólogo, haciéndolo por la forma mixta.

Muchas mujeres eligen el método mixto, debido a que cuando van a las revisiones, el médico que las atiende no les resuelve sus dudas, y ya se sabe que si pagas, parece que en el sistema público no son conscientes de que les estamos pagando, te “contemplan” mas. El término “contemplar” es muy curioso y también el más utilizado por los facultativos. Parece ser que el embarazo a pesar de ser escaso, es una fuente de ingresos extra nada despreciable para los ginecólogos. Teniendo en cuenta que una consulta privada ronda de media los 120 € y que la inmensa mayoría de estas consultas, pertenecen a los mismos profesionales que pasan consulta gratuita por la seguridad social donde en teoría está permitido elegir al médico, si ponemos como norma general unas 6/8 revisiones entre ecografías y controles, no me parece, que se medicalice y se empañe tanto ese periodo por un puñado de euros, o tal vez si, tendrá que haber otros motivos, tendré que informarme mas. ¿? CONFIRMAR.


Una vez decidido esto, si optas por el sistema público, el primer paso es ir a visitar a la matrona en tu centro de salud. La matrona, te abre la historia y organiza las próximas visitas y análisis de control del embarazo (ecografía, análisis de sangre y orina y el tocólogo).

Primera sorpresa!!

Cuando en la primera visita le pregunté a la ginecóloga, si era ella la que se iba a encargar de llevar mi embarazo y me contestó -una de ellas-; no lo entendí, siempre había creído que sería como el médico de familia, cada ginecólogo sería el responsable de unas cuantas embarazadas del principio al final de la gestación. Ese fue mi primer error. Llevar el embarazado por la sanidad pública implica que de las ...5 o 6 veces que “te revisan” tengas suerte si 2, te toca el mismo médico, y mas adelante en el parto ocurre lo mismo, puede que no lo hallas visto nunca. La explicación que me dieron fue: “quien sabe que día y a que hora te vas a poner de parto, estará quien le toque estar”. Sin olvidar a los “estudiantes” que también meten la mano por prescripción facultativa y muchas veces con el desconocimiento y sin permiso expreso de la propietaria de la vagina.

Con la matrona es diferente pero parecido y por supuesto tampoco demasiado lógico.
La matrona de tu centro de salud no es quien te va a asistir en el parto y a la que lo haga no la vas a conocer hasta ese momento. Como en el caso del tocólogo “estará quien le toque estar” me repitieron...........